EE....UU!!!!

Casi estoy recién aterrizado. He pasado una semana en los estates. Me lo he pasado bien, muy bien. A continuación os relato algunos de los pasajes del viaje:

20/5-22/5:

Llegué a Miami directamente desde Barajas. 10 horas de vuelo, que con el cambio horario se quedan en 3. La sensación es rara, casi de euforia. Mola. Nada más alcanzar el hotel, DF y yo nos tiramos a la piscina (literal) y nos damos nuestro primer chombo del viaje. Unas bombas y una margarita que me sentó como un tiro nos amenizaron la tarde. Tras eso, fuimos a cenar al Bayside. Estaba al lado del hotel. Mucho cubano y un olor a fast food inconmensurable. Decidimos cenar en un restaurante cualquiera y elegir una comida cualquiera. ¿Resultado? El esperado, raciones gigantes y personas muy gordas a nuestro alrededor. Primeras risas.

Después nos dirijimos a 'Macarena'. Un restaurante-garito muy divertido que se encuentra en Washington Avenue. El propietario, un amigo de EFlc muy amable por cierto, se encargó de que nos tratasen estupendamente. Allí fue donde, por primera vez observamos el calibre de las féminas de Florida. Digo calibre porque la silicona rebosa por toda la ciudad. Hay más goma que en una fábrica de neumáticos. Eso sí, mujeres muy bellas. A la hora o así de tomarnos unos rones, el desfase de horas nos ataca y decidimos retirarnos pronto. A sobar.

Al día siguiente empieza el carrusel. Desayuno y ... playa. Miami Beach es una playa alucinante. Yo no paraba de buscar a Sonny Crockett, pero creo que ese día estaba fuera de la ciudad. Comemos en un restaurante cubano, en el que presumían de tener un plato que consistía en nosequé con queso manchego!!!. Me hizo gracia, no sé. Morriña, igual.

Por la tarde, de compras. Mucho Ralph Lauren, mucho Tommy Hailhitler y Calvin Klein. Es lo suyo, no? Volver al hotel cargado de bolsas como si en España no hubiese tiendas. Qué paletos somos, joer!.

Llega la noche del sábado, previo paso de nuevo por la piscina del hotel. Espectáculo gratuito para los americanos que se encontraban a nuestro alrededor. Torres humanas, bombas, posturas acrobáticas y nuestra risa salvaje que comparada con lo bajito que hablan ellos parecía provenir de las cavernas de Atapuerca. Que se jodan. Quedamos con Carlos, un amigo de DF. Este muchacho se casó con una americana que le dio la patada poco después de contraer matrimonio. Inesperadamente, fuimos nosotros quien le sacamos de marcha a él!! El tipo parecía abducido por algún ente sospechoso (posiblemente por Sonny Crockett). Qué lástima. Tras dar unas vueltas estúpidas recalamos de nuevo en 'Macarena'. El sábado parece ser el día bueno. Está repleto de señoritas receptivas, tanto que son ellas las que no tienen ningún problema en entrarte. A las pruebas me remito. Ligué. Sí. Impresionante, verdad? Pues eso. Aunque para impresionante la cara de mi jefe cuando me vio desenvolverme en un ambiente bien distinto a la oficina con tanta soltura. Antes mi ídolo era él, creo que las tornas han cambiado un poquito desde ese día. Y desde este viaje.

22/6 - 27/6:

Al día siguiente, viaje a Ohio. Mount Vernon es un pueblo pequeño, a unas 50 millas de Columbus donde pasamos el resto de semana con la excusa de un curso de mantenimiento avanzado de compresores. Es un lugar precioso. Muy verde. Completamente distinto a Miami. Contrapuesto, de hecho.

Casi lo único que hicimos al llegar, fue pegarnos otro chombo en la piscina. Esta vez más corto. El agua estaba sucia. Nunca más volví.

El curso? Como decía, una excusa. Moló pero lo mejor era la cara de dos de mis compañeros (que no hablan apenas inglés) durante 8 horas diarias simulando que atendían. Debe ser como estar encerrado en un cuarto con un coche arrancado RRRRUMMM, RRRRUMMMM, RRRUMMM...

El resto del viaje? Plagado de anécdotas. Insisto, una visita que dificilmente olvidaré.

Á.

PD1: Después de esta, también he entrado a formar parte de la secta iPod y me compré una guitarra. Puto consumismo...

PD2: Algún día colgaré aquí la foto oficial del curso. Cuando aprenda como se hace.