Mi vida sin mí

Hoy me he dado cuenta de que me pesan en el pecho las palabras que me he callado, he descubierto que no es esta tos perruna lo que me hace sentir así. Que ésta es solo un reflejo: los tequieros, los tebusco, los medueles, los teechodemenos y todas las cosas que siempre me costó decir son pesas que me impiden respirar con facilidad.

No recuerdo haber dicho jamás cuánto me gustaba mirarte al dormir (aunque casi siempre era yo quien caía rendido primero) porque pones cara de niña y al deshacerte de la edad, eliminas las desilusiones y las cicatrices del alma, te das la oportunidad de ser feliz sin negártelo. Por eso, a veces, te he amado más dormida que despierta. Ahora no me lo perdono.

Si te intento imaginar, ahora se me descolocan tus rasgos, y se mezclan con todas las sensaciones que me suscitas. Esas pestañas, me pierdo en ellas, Me atrapan. No sé salir. ¡¡Maldito laberinto!! - y la boca no es boca, es beso, es saliva, es sabor, es blanda y fresca, y tus labios, cerca del corazón, y esas manos con las que me tocabas y sacabas de mí la parte que nunca antes habías visto. Esa que a menudo escondo e incluso yo mismo me niego.

Esa indomable naturaleza tuya hace que, a tu lado, todo se sienta más:los días de invierno más largos, las noches más oscuras, la música más vibrante (escucho "Don't go away"de Oasis y nada me hace sentir más cerca de tí en este momento), el amor más verdadero y la amistad más sincera.

Anoche viajé en sueños hasta tu casa. Detuve mi coche al lado, bajé la música - “Teardrop, de Massive Attack” – y permanecí allí por un corto espacio de tiempo, escuchando las sirenas, tus silencios, oliéndote desde lejos… pero no lloré. Quise bajar para decirte algo en medio de la noche, como antes, lo que fuera con tal de mirarte, pero al acercarme con paso firme al portero automático me di cuenta de que no sabía qué, que aunque lo intentara no podía articular palabra… porque esta vez no tenía qué decirte.

Por suerte, solo fue eso, un sueño. Nunca antes estuve tan cargado de motivos para hablar.

Á.