Friday, September 24, 2004

Bodas

Una más, una más... y van... ahora mismo no recuerdo cuántas han sido las bodas de compañeros de carrera a las que he ido asistiendo en los últimos años. Lo que sí mantengo fresco como si hubiese ocurrido ayer es la que supuso el fin de la soltería de mi querido C. Posiblemente la más infame en la que he tenido la infinita suerte de tomar parte. Lo tuvo todo:

* Ceremonia cutre con música de fondo de Celine Dion y Enya irrumpiendo desde las tripas de un loro de 30 euros
* Cura mexicano plasta. Muy pesado, de verdad
* Acompañamiento olvidadizo (suplieron el lanzamiento de arroz por un espontáneo aplauso...) Impresionante documento el gesto de mi C. tras taparse él mismo y a su ya esposa ante el no-arroz y el mencionado aplauso "plas-plas-plas" y "vivan los novios" que no fueron suficientes para acbar con el patetismo del momento. Yo, perplejo.
* Cena en el salón de bodas más salón de bodas de Madrid. Situado cerca del Pardo. Menú de película de miedo:

1. Lamentables canapés
2. Pescado congelado con salsa de algo
3. Chuleta de Ávila, debía de ser así porque el que empanó la chuleta de cerdo vivía allí.
4. De postre, una tarta que violaba la ley de relatividad. Si Einstein levantase la cabeza!!! Mientras los novios procedían al barraganiano ritual de cortar la tarta frente a los comensales (pastel de color blanco, supongo que de nata o una sustancia similar), nos hacían entrega de un pedacito de dulce ¡¡De chocolate negro!!. Sí, amigos, al mismo tiempo. No daba crédito. La relatividad especial decía algo sobre el cambio de estado o composición al viajar a la velocidad de la luz? Exijo datos...Eso sí, no dejé ni las migajas porque visto lo visto, los del restaurante eran capaces de colocárselo a los del siguiente enlace. Más que capaces. Después de haberme zampado aquello empecé a sugestionarme y autoconvencerme de que el pastel de mi acompañante poseía una sospechosa marca de cucharilla en uno de los laterales...
5. Barra libre... con garrafón!!! Esa fue la primera vez que probé un gin tonic de Varón Dandy con schweppes. Me tomé uno, no pude con más. Tengo en alta estima a ambos, mi cerebro y mi estómago y por ese orden, que conste en acta. Mi amigo D. que, acompañado de su esposa, incluso extrajo sigilosamente dinero del sobre, en principio cariñosamente dedicado a los contrayentes, mantenía la tesis de que no era Varón Dandy, sino Floyd. Su abuelo fue barbero y aquí quien entiende de lociones es él. No hay más que hablar. Menudo personaje. Otro de mi galería de elementos célebres. Si el profesor Cojonciano le conociese haría un monográfico, qué digo un monográfico, una página semanal fija en "El jueves".

6. El acompañamiento. Los padres, herman@s, amigos, conocidillos, primos lejanos retomados para la ocasión... todos eran unos chachos de puta madre. Hubo momento servilletas al viento, cánticos y bailes regionales... todo el kit.

7. Camareros. No faltó el camarero sudoroso que te tira algo encima. Una cosa...

8. Al día siguiente mi amigo D., su mujer C., mi acompañante S. y yo... todos malos.


Bueno, por último solo añadir que este sábado se casa mi amigo P. Esperemos que la boda cumpla las expectactivas. Os mantendré al tanto...

Besitos y abrazos



1 Comments:

Blogger dwalks said...

Buen intento, pero esto que usted ha contado está muy lejos de lo que podría llegar a ser un evento de este tipo.

Escuche y póngase en situación:

Lugar: Casino de Valencia
Evento: Boda
Fuente: Un amigo mío que fue
Suceso: Llega el momento de la tarta. Mi amigo sentado en su mesa, esperando a que saliera algún individuo vestido de camarero ofreciéndole un sable a los novios para que cortasen la tarta. Algo estándar, vaya. Pues no. De repente, todo cristo se levanta como lo más normal del mundo y hacen un corro en la pista de baile (???). Mi amigo se acerca y todo el mundo comienza a apludir con verdadera furia. (????????). En ese momento, el suelo se abre y emergen, sobre una plataforma los novios, la tarta y la espada. Banda sonora: Titanic. Las luces te las puedes imaginar.

Supere eso Agr, supérelo. Le recomiendo que no lo intente pues aún tengo un par de ases guardados en la manga (hágase cargo, estoy hablando de tartas que bajan del techo o chuletones de Ávila presentados con una bengala encendida, pinchada el centro).

6:39 AM

 

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